Técnicamente, los recursos naturales son aquellos elementos o materiales que la naturaleza nos ofrece. Además, tradicionalmente, existen dos tipos de recursos naturales: renovables y no renovables. Su explotación es vital para el desarrollo del ser humano. Sin embargo, hacerlo desmesuradamente puede ocasionar serios problemas. Por ello, vamos a tratar las consecuencias de la sobreexplotación, ¡allá vamos!
Es vox poluli que la sobreexplotación de los recursos naturales es un problema muy presente. De hecho, es evidente que el consumo descontrolado de recursos tiene efectos a distintos niveles. Por ejemplo, medioambientales, económicos y sanitarios. A continuación, los desarrollamos uno por uno.
Se basan en la desaparición de los hábitats donde múltiples especies de animales y plantas viven. Así, esto trae como consecuencia que muchas especies desaparezcan. Según la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza), 26 197 especies se encontraban en peligro de extinción en 2018. Un ejemplo clásico es la sobreexplotación de los bosques.
Según la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), el 33 % de los suelos del planeta está altamente degradado. Además, a medida que mayor parte del suelo se encuentre degradado, menor será el porcentaje de este donde se pueda producir. Así, esto podría traer consigo una subida de precios de los productos agrícolas.
Nueve de cada diez personas en todo el mundo respiran aire con altos niveles de contaminación, según afirma la OMS. Además, siete millones de personas mueren cada año por la contaminación del aire ambiente y doméstico. Así, si se da una sobreexplotación de los árboles, habrá menos oxígeno. En consecuencia, la calidad del aire será peor; lo que podría acarrear problemas para los seres vivos.
Las causas de la sobreeplotación de los recursos naturales pueden ser muy variadas. No obstante, vamos a distinguir dos de ellas, las cuales son las principales y más importantes.
Naturalmente, la sobreexplotación, al igual otros problemas medioambientales, tiene solución. Como hemos dicho en otros artículos, parte de esta se basa en la concienciación de todos y en las medidas que los gobiernos puedan tomar al respecto. Algunas de las posibles respuestas este problema son:
Claramente, es un asunto controvertido ya que pone en tela de juicio intereses económicos. Indudablemente, hay que buscar un equilibrio entre el beneficio y el daño medioambiental. Por ello, la clave está en respetar los ciclos del planeta y en tener un consumo responsable de los recursos que nos proporciona.