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¿Te encanta la agricultura ecológica y además te gustaría tener tu propia granja en la que tus animales disfrutasen de hermosos pastos ecológicos pero dispones de poco terreno? No renuncies a tu sueño: descubre cómo tener una granja autosuficiente en tan sólo media hectárea.
Mucha gente ha descubierto las ventajas de tener su propia granja autosuficiente. Por ejemplo, ésta es una buena alternativa para conseguir los alimentos que necesitas para subsistir, y también te ayudará a tener la certeza de saber que el producto que consumes es ecológico y ahorrarte dinero al consumir alimentos ecológicos más frescos y saludables.
Si dispones de poco espacio para montar tu propia granja, te damos unos consejos para tener una granja autosuficiente en media hectárea:
Son muchas las ventajas de tener una vaca en tu propia granja autosuficiente. Y es que no hay nada mejor para llevar una buena alimentación que consumir productos lácteos elaborados a partir de leche fresca.
Sin embargo, para elaborar tus propios productos lácteos, debes contar con una amplia experiencia en el proceso de pasteurización de la leche, así como en la elaboración de productos lácteos adulterados.
Además de tener una vaca, si tienes más animales como aves de corral o cerdos, éstos también podrán beneficiarse del suero de la leche, un complemento muy saludable en la dieta de estos animales de granja.
Otra de las ventajas de tener una vaca en tu granja es que también podrás fertilizar el huerto con el estiércol de este animal tal y como se hace en la agricultura biodinámica, y comprobarás como el suelo aumenta su fertilidad y te da un mayor rendimiento.
Debes tener en cuenta que una vaca lechera no puede estar a la intemperie durante todo el año. De hecho, debe pasar la mayor parte del invierno en el interior, y aprovechar el tiempo seco para hacer ejercicio y estar en el exterior. Durante el tiempo que estén en el interior deberán alimentarse con hierba almacenada, evitando pastar en el exterior.
En el caso de los cerdos, si decides criarlos en tu granja autosuficiente, éstos también deben ser confinados en un habitáculo durante gran parte del año. La mejor opción es un habitáculo móvil con una cerca móvil, aunque también puedes tener una pocilga permanente en su lugar.
Y si también tienes aves de corral, puedes construir para ellas una casa permanente en una de las esquinas del huerto, o también puedes fabricar corrales en los recintos móviles, pues sus excrementos son muy beneficiosos para la fertilización del suelo. Recuerda que no es conveniente tener una gran cantidad de aves, ya que una docena de gallinas dan los suficientes huevos como para mantener a una familia entera.
Durante el invierno las gallinas necesitarán tomar un suplemento de proteínas o disponer de suficiente cantidad de grano. Por ello, una buena opción es por ejemplo plantar un girasol, trigo u otros cultivos específicos que puedan proporcionarte grano para las gallinas durante todo el año.
Si has dividido el terreno en dos, en una de las mitades deberías tener la granja con animales y la otra mitad puedes dedicarla a la horticultura intensiva. Para ello, tienes que dividir la otra mitad en cuatro pequeñas parcelas en las que deberás llevar a cabo una rotación de cultivos.
Un modelo de rotación de cultivos válido para tu huerto ecológico y que ofrece un buen rendimiento para una granja sostenible sería, por ejemplo: grama (durante cuatro años), parcela 1 con cultivo de patatas, parcela 2 con cultivo de zanahorias, parcela 3 con cultivo de vegetales de raíz y después, grama de nuevo durante otros cuatro años.
En cuanto a los cultivos de la huerta, los más comunes son las hortalizas y las frutas, pero también puedes contemplar la opción de tener cultivos forrajeros que te servirán para alimentar a los animales.