A medida que pasan los años el calentamiento global va dejando una serie de consecuencias irreversibles en nuestro planeta. Descubre las negativas consecuencias del calentamiento global, a continuación.
El calentamiento global es el proceso a través del cual va aumentando la temperatura de la Tierra a medida que pasan los años. Aunque son muchas las causas que generan el calentamiento global, los científicos apuntan, sobre todo, a la constante emisión de gases de efecto invernadero por parte de los seres humanos que vivimos en la Tierra, siendo el más dañino y perjudicial el dióxido de carbono.
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Sin embargo, lejos de beneficiarnos, el calentamiento global tiene una serie de efectos muy nocivos para nuestro planeta. Te contamos las 6 principales consecuencias que deja el calentamiento global:
Con la excesiva acumulación de gases en la Atmósfera, la temperatura de la Tierra es más elevada a medida que pasa el tiempo y, como consecuencia, el cambio climático. La creciente elevación de temperaturas genera la sequía y con ella, aumenta también el riesgo de incendios que provocan la desertización del planeta y la deforestación.
Estamos acostumbrados a ver en televisión los efectos devastadores de los temporales que azotan a diferentes países del planeta durante todo el año. Esta es, sin duda, otra de las consecuencias directas del calentamiento global.
Y es que, al ser más elevadas las temperaturas, las lluvias son menos frecuentes pero más intensas y provocan, en muchos casos, inundaciones a gran escala con efectos devastadores para la población.
Seguro que ya has experimentado la sensación de que cada verano es más caluroso que el anterior. Pues esta es, precisamente, otra de las consecuencias directas del calentamiento global, que las olas de calor son más fuertes e intensas cada verano.
Esto se debe a la quema acelerada de combustibles fósiles que ha afectado sobre todo al Polo Norte, y que ha provocado que esta zona de la Tierra esté a día de hoy mucho más caliente que hace 50 años.
Al registrar los océanos unas temperaturas más altas cada año, el proceso de derretimiento de los casquetes polares se acelera, lo que provoca que aumente en nivel del mar. Esto afecta de forma directa y muy negativamente a la flora y la fauna que habita en los océanos.
Pero además, este es uno de los efectos más graves del calentamiento global ya que de cara al futuro, podrían desaparecer muchas islas y también muchas ciudades podrían ver reducida su distancia a la costa.
Los expertos apuntan a que el nivel de los mares y océanos aumentará entre 18 y 60 centímetros a finales del siglo XXI. Pero, además, si continua el derretimiento de los polos, el nivel del mar podría aumentar entre 10 y 20 centímetros adicionales cuando acabe este siglo.
Otra de las consecuencias negativas del calentamiento global es que al registrar el planeta unas temperaturas más altas y más sequías e inundaciones, cambian los ecosistemas, lo que se traduce en un cambio de climatología.
Por ello, es normal que cada año se produzcan cambios en la duración de las estaciones, y que el patrón de temperaturas en el planeta sea cada vez más parecido al de los climas monzónicos.
Al traer el calentamiento global más sequías y temporales de lluvia más violentos, se pone en peligro la producción de alimentos básicos, como por ejemplo, la del trigo. Al escasear los cultivos, los precios de los alimentos se incrementan, lo que afecta de forma directa a los países menos desarrollados que cuentan con altísimos índices de pobreza.