Cunado hablamos de "factores" biológicos, estamos haciendo referencia a los agentes que emiten algún tipo de impacto en nuestro ecosistema. A diferencia de los factores bióticos, los que se consideran abióticos son aquellos que NO tienen vida.
En este artículo de Ecotrendies vamos a descubrirte de forma detallada qué son los factores abióticos para que, así, conozcas mejor los elementos que forman parte de nuestro ecosistema y que permiten que el planeta esté equilibrado y pueda desarrollarse vida.
La importancia de los factores abióticos
Para entender bien qué son los factores abióticos tenemos que saber que, en cualquier ecosistema, existen dos tipos de factores:
- Bióticos: los agentes que tienen vida como, por ejemplo, la fauna, la flora, los microorganismos, etc
- Abióticos: al contrario de los anteriores, estos son los que no disponen de vida
¿Cómo pueden haber factores abióticos en nuestro planeta? Muy sencillo. Estos agentes aparecen debido a los elementos químicos y físicos que hay en el entorno. Por tanto, podemos encontrar estos grandes grupos: factores abióticos de agua, factores abióticos de aire y factores abióticos de suelo.
Pero, no nos confundamos: aunque estos elementos no cuenten con vida propia, son igualmente indispensables para que haya vida en el planeta. Es decir, sin estos factores no podríamos hablar del planeta Tierra tal y como lo conocemos actualmente. Los factores abióticos permiten que se desarrollen los seres vivos, que se reproduzcan y que sobrevivan. Y es que, ¿acaso un león podría vivir sin agua o sin aire? ¿Y una ballena?
Es por este motivo que, para que existan los factores bióticos, es imprescindible que en el entorno haya factores abióticos. De lo contrario, no sería posible la vida en nuestro planeta.
Ejemplos de factores abióticos de un ecosistema
Ahora que ya conocemos la definición de factores abióticos, vamos a descubrirte algunos buenos ejemplos que te ayudarán a comprender mejor nuestra explicación. Cuando hablamos de este tipo de factor nos estamos refiriendo a la existencia de, por ejemplo, factores abióticos terrestres como, por ejemplo, los siguientes:
- La luz del sol: es uno de los más importantes de nuestro planeta e indispensable para que se haya podido generar vida en la Tierra. El sol permite que las plantas realicen la fotosíntesis y que los humanos podamos sobrevivir en el entorno.
- La temperatura: también es importante que la temperatura del ecosistema sea la adecuada para poder permitir el desarrollo de la vida. En el caso de planetas muy fríos o muy cálidos, no se conoce la existencia de vida porque ningún organismo podría vivir en semejantes condiciones.
- La presión atmosférica: es otro de los claros ejemplos de factores abióticos ya que, esta presión, es la que ejerce la masa de gas y permite que se pueda generar vida. Existe esta presión tanto en la tierra como en el agua, por ello, los seres que viven en ambos entornos son tan diferentes entre síes.
- Química del aire: también existen factores abióticos químicos que interceden en el desarrollo de un entorno óptimo para la vida. En el aire existe un intercambio de gases, es decir, tomamos oxígeno y liberamos CO2, este intercambio es el que permite la vida.
- Química del agua: los factores abióticos del agua también es otro claro ejemplo de este tipo de elemento. Es decir, por ejemplo la salinidad que hay en este entorno es esencial para que que tenga lugar la vida. También la concentración de nutrientes en el agua o el oxígeno nos permite disponer de una calidad acuosa ideal para que pueda aparecer vida en ella.
- El pH: y, por último, otro de los ejemplos que queremos mencionar el pH, un término que seguro que has oído más de una vez. Se trata de una propiedad química de entornos como el agua o el suelo y que determina cuál es el nivel de acidez que contiene. Cuando un espacio es muy ácido, difícilmente se desarrollará en él la vida.
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