Ya no es una sorpresa de que las terapias ecológicas como el shinrin yoku son beneficiosas. De hecho, los beneficios de sumergirse en la naturaleza fueron el principal motivo por el que el Ministerio de Agricultura, Silvicultura y Pesca japonés en 1982. Indudablemente, es un ejercicio cuyos efectos físicos se hacen notar en la salud. Además, tiene muchos beneficios psicológicos, quizás, más importantes. ¿Quieres conocerlos?
Se trata de una actividad que surgió en Japón hace casi 40 años. Fue una campaña del Gobierno para incentivar el turismo de naturaleza. Sin embargo, es ahora cuando la creciente demanda demuestra que estos shinrin yoku deben tener numerosos beneficios para los que los practican.
Por supuesto, no se trata de ir al bosque sin más y el «baño» no implica que haya agua de por medio. Más bien, se trata de sumergirse en la naturaleza. Esto implica que debes ir sin una idea preconcebida de lo que vas a hacer y dejarte llevar por los estímulos del bosque.
Desde su aparición, en 1982, ha transcurrido suficiente tiempo como para realizar estudios sobre diferentes tipos de personas y enfermedades. Por supuesto, los resultados corroboraron la eficacia de estos baños de bosque sobre la salud. Es más, demostraron que sus beneficios afectan positivamente la salud física, además de la mental:
Para comenzar, se puede ir desde solo hasta en grupos, incluso con guías. También puede darse un corto paseo. Se han observado beneficios para la salud con tan solo 15 minutos de paseo. Sin embargo, existen hasta paquetes de viaje con varias sesiones a lo largo de unos días.
Si necesitas despejarte un poco de la vida cotidiana, puedes alejarte de la ciudad y buscar una de las muchas rutas que existen en España. En cambio, si prefieres una actividad que te enseñe a disfrutar del bosque, puedes contratar los servicios de un guía. Este, como un profesor, te indicará los pasos a seguir para desconectar de los problemas y sumergirte de verdad en el shinrin yoku.
Antes de nada, si te interesa un primer contacto, existen rutas catalogadas que puedes encontrar por Internet. Ahora bien, si vives demasiado lejos de una de estas rutas, vamos a explicarte cómo buscar el bosque apropiado:
Así que ya sabes, la clave antiestrés podría ser tan simple como buscar un pequeño bosque y perderte en sus sensaciones. Apaga el móvil una hora y mira el sendero ante ti. O siéntate apoyado en un árbol. Incluso si te cuesta sentir algo, tu cuerpo sentirá los beneficios.
Ver más: Características de los diferentes tipos de bosque
Fuentes consultadas: